miércoles, 22 de junio de 2016

Maestría en Educación Facultad de Educación sustentaciones de trabajo en torno al saber pedagógico

La investigación de la práctica pedagógica en la formación de maestros colombianos, una experiencia en la Facultad de Educación de la Pontificia Universidad Javeriana



A continuación hago reporte de los estudiantes de maestría que se graduarán  el  6 de agosto del presente año.  Estos estudiantes  sustentarán en el simposio que se llevará a cabo el  próximo 23, 24 y 25 de mayo.  La pre sustentación se realizará el lunes 2 de mayo de 6 a 9 de la noche en el edificio Lorenzo Uribe.  Coordina Rafael Reyes Galindo.

ESTUDIANTES

TRABAJO DE GRADO

TUTOR

EVALUADOR

Gloria Patricia Gómez Galindo
Jenny Paola Gómez calderón

LA EVALUACIÓN DE DESEMPEÑO DOCENTE.Una mirada al perfil del maestro colombiano  instalado en el discurso empresarial

Rafael Reyes Galindo

Beatriz Rodríguez Vega

Wilmer Alexander Vargas SanabriaMiguel Ángel MolanoAlexander Montealegre

El saber escolar en la autobiografía de tres maestros

Oscar Saldarriaga

Rafael Reyes Galindo

Ángela Sánchez BernalEsperanza MartínezSandra MartínezLuz Clara Cruz RivasDiana Campos

La escritura de la práctica en los maestros de Bogotá

Rafael Reyes Galindo

Nubia Lucia Gaitán  Feo

Nubia VelascoNancy Rodríguez

El currículo y sus transformaciones en el Distrito Capital

Beatriz Rodríguez Vega

Nubia Lucia Gaitán  Feo


Atentamente,




Rafael Reyes Galindo
Línea del saber pedagógico y formación de maestros.

Campo de saberes críticos y formación de maestros

23 de mayo del 2016 Rafael Reyes Galindo


Recojo aquí, el discurso reiterativo, la cantaleta si se quiere, del grupo de profesores que han coordinado esta Línea, esta búsqueda del saber pedagógico y la formación de maestros. La insistencia de maestros como Saldarraiga, Beatriz, Nubia Lucía queda como lección, como advertencia, como signo de contradicción, como acusación y como indicación para la esperanza; aún se puede viajar a pie.

Primero. El carácter específico de la investigación de la práctica pedagógica.
Nuestros ámbitos de estudio son la formación de maestros, la investigación del territorio de la escuela y la pedagogía como saber. Cuestionamos el papel subalterno que cumple la pedagogía en las políticas de formación de maestros y analizamos el hecho de que solo se despliegue subordinadamente al interior de otras disciplinas como las sociales, las disciplinas psicológicas, lingüísticas, filosóficas, etc. pero no como saber especifico de la las relaciones educativas y de construcción de comunidad. Una consecuencia de que la pedagogía funcione solamente como saber anexo a otras disciplinas conlleva a que ésta se presente simplemente como metodología instrumental, o se le revista de aplicacionismo o de tecnología educativa. Esto conlleva también a una acentuada subordinación de la pedagogía frente a otras disciplinas y se desconozca su dimensión reflexiva.
El carácter subordinado de la pedagogía lesiona la comprensión del papel social de la escuela y del maestro. La escuela se convierte en espacio vulnerado por objetivos que poco o nada tienen que ver con la educación: mercado, competitvidad, optimización; La formación pierde dimensiones integrales y se presenta como capacitación. Por otra parte el maestro sería presentado como subalterno frente a otros intelectuales de la educación. Por eso, nosotros, dirigimos la atención en forma específica, directa e intencional hacia el triángulo conformado por la pedagogía, la escuela, el maestro como ámbito aún no pensado suficientemente.



Segundo: problematizamos las mismas prácticas con la que se forman a los maestros para abordar la escuela y los saberes escolares.


Hemos querido introducir una problematización a las prácticas de investigación formativa en pedagogía y educación que se instala en la formación de maestros en Colombia. Al maestro no se le forma para investigar sino para contextualizar conocimiento con una secuencia metodológica. En la Línea de investigación Saber pedagógico y formación de maestros hemos replanteado estas dinámicas procedimentales, aunque con poca recepción de los mismos educadores.  A partir de qué significa cultivar la indagación en pedagogía y en educación buscamos iniciarnos en la interrogación de la pedagogía, del maestro y de la institución educativa.
Hemos advertido, entonces, que investigar, no es que uno conozca mejor su objeto de estudio, sino que los piensa de otro modo; no es que clarifique los fundamentos que lo acompañan sino que socava esos fundamentos que ya se tenía. No es que se refuercen  las teorías aceptadas, sino que las cuestiona como obstáculos. Por esta razón, la investigación entra en crisis; se hace sísmica, desestabiliza lo que nos era cercano y familiar. Nuestra propósito formativo era construir  preguntas frente aquello que, hasta ahora,  era natural  obvio y  necesario para nosotros los maestros.

Pasa con frecuencia en nuestras investigaciones que,  como ya estamos informados de cómo “debe ser” la escuela, no tenemos una forma de acercarnos  a su cotidianidad; como ya tenemos la secuencia metodológica para transmitir se nos escurre por entre los dedos el saber sobre la enseñanza; como ya identificamos el perfil del profesor para los retos actuales, perdemos al maestro; como ya hemos profesionalizado la docencia, menoscabamos el oficio. 

Reconocemos que en la Línea saber pedagógico y formación de maestros ha sido un ejercicio telúrico.  ejercicio telúrico de socavar en doble vía la forma como se ha construido la pedagogía y el oficio del maestro: una pesquisa histórica, epistemológica de la construcción de la pedagogía como discurso y como disciplina; y un trabajo político y ético de insurrección de la pedagogía como saber sometido frente a los llamados “intelectuales” de la educación.



Finalmente, un trabajo de un maestro colombiano debería ser vida organizada en un rigor narrativo. No salir aburridos de un trabajo de grado. Salir, más bien, maestros de sus investigaciones. Los invito a seguir en esta pesquisa, en la línea de lo que Saldarriaga llama “escribir las prácticas” y el “hacer saber”




En efecto, “escribir las prácticas” configura la desarticulación  de perspectivas mecanicistas, o al menos unilaterales, en la que se está instalado la noción de práctica pedagógica en nuestras Facultades por obra y gracia de las políticas educativas.  Frente a las exigencias que se le hacen a los profesores de “saber hacer”; nosotros proponemos, lo contrario, “hacer saber” (Saldarraiga 2003);  introducir la novedad, pero también, la tensiones, la paradojas, las contradicciones que constituyen el sentido de la relación pedagógica y de toda intencionalidad formativa.

Un trabajo de grado podría ser la expresión de este “hacer saber”. Así los proyectos finales sustentados expresarían la ruptura  de la subalternidad en la que se ha instalado a las maestras y maestros colombianos; reinvindicaría un oficio, rescataría un horizonte de formación y reconceptualizaría la función de la pedagogía como condición de posibilidad  para el posicionamiento de sujetos libres, para pensar el país, para exhibir una ética, para proponer una estética, para leer el presente y construir el porvenir en colombianos que merecen una formación integral.  Esta formación integral, es un “hacer saber” que como “campo conceptual” y “campo narrativo” (Saldarriaga 2015) pretendemos desarrollar el conjunto de profesores y estudiantes que deseen continuar en la Línea del saber pedagógico. 

No es obstinación, es luminosa certeza y gozosa convicción la que tenemos de que las maestras y maestros de nuestro país  son el lugar de sentido para la recuperación de los “países de Colombia”; son la “piedra de toque” para construir en cada niña, en cada joven y en cada ser humano una vida bella, como paciente labor, de darle forma a su impaciente libertad. 





viernes, 29 de noviembre de 2013



Presentación

El Semillero Saber pedagógico y Formación de maestros, arqueología de un oficio es un espacio de construcción colectiva de herramientas de investigación para la pedagogía y la educación. Propicia el hacer saber pedagógico sobre la infancia, la juventud las construcciones de género,  el espacio escolar, y la reivindicación del sujeto maestro en la sociedad colombiana.

El Semillero  cultiva la actitud de indagación  propia de la  investigación formativa para estudiantes de Pregrado y Posgrado; incorpora enfoques  arqueológicos, genealógicos, lingüísticos, hermenéuticos, fenomenológicos  para la recuperación de la historicidad  de la práctica pedagógica colombiana y latinoamericana.

TUTORES: Nubia Lucía Gaitán, Beatriz Rodríguez Vega, Rafael Reyes Galindo, Oscar Saldarriaga Velez, Carolina Avendaño.

Monitora estudiantil del Semillero: Yuri Parra. 
contacto: arqueologiadeloficio@gmail.com

El saber pedagógico y la formación de maestros:

El Semillero tiene el propósito de relatar  el acontecimiento de la escuela en los términos en que entendemos el  saber pedagógico; es decir, nos  remitirnos a un conjunto de relaciones tensionales entre teorías y prácticas tanto hacia dentro de la organización escolar como hacia su contexto externo, tensiones que son constitutivas tanto del saber – hacer del maestro como de la configuración de la institución escolar y de sus relaciones con su medio;  Lo que nos permitiría, construir análisis complejos y dinámicos de las relaciones teorías, prácticas, sujetos, instituciones, saberes y comunidades leyendo la movilidad permanente de unas tensiones constitutivas entre  todos estos elementos. (Saldarriaga, 2005)


La actitud de indagación
Dice Estanislao Zuleta que nosotros,  en nuestra vida pedagógica, nunca nos encontramos con los niños, sino con las ideas que tenemos de ellos; esto sucede incluso cuando los tenemos al frente en vivo. Entonces, ¿Qué significa cultivar la actitud de indagación? Si seguimos las afirmaciones del maestro colombiano Estanislao Zuleta, se puede decir que cuando uno se propone investigar algo, lo que haría, sería,  pensar ese algo, pero de otro modo: “De lo que se trata más bien es de aprender a pensar un objeto, de acceder a pensar un objeto en el que no podemos pensar por una serie muy vasta de obstáculos” (1980). En el caso que nos ocupa, es decir, la pedagogía y la educación la investigación tendría que ver con aprender a pensar los objetos (y los sujetos) de los cuales se ocupa: aprender a pensar la evaluación, aprender a pensar el currículo, aprender a pensar la didáctica, las disciplinas escolares;  aprender a pensar la lectura, la escritura; aprender a pensar la infancia; aprender a pensar al maestro, la enseñanza, la escuela etc. 

Dos cosas parecen desplegarse en el ejercicio de pensar de otro modo los sujetos y los objetos de los que se ocupa  la pedagogía y la educación;   uno remover obstáculos; y otro moverse a otros modos de conocimiento:
Primer despliegue. Abordar el objeto de saber,  enfrentar los obstáculos que nos impiden pensar lo que queremos pensar abordar. Remover, conmover, tomar distancia frente al cúmulo de conocimientos que ya tenemos sobre la evaluación, la enseñanza, el aprendizaje; sobre el maestro, la escuela, la pedagogía, etc. Desinstalarse de las certezas ya admitidas; romper, fracturar, hacer rupturas, interrumpir  la pretensión de que mi conocimiento pedagógico es “objetivo” porque posee un sustento epistemológico que lo respalda.  

El otro despliegue: moverse; una vez se ha perdido el “suelo” hay que dirigirse  hacia otro “lugar”. Rota la esfera de protección hay que producir unas condiciones de resguardarse; quiero decir, construir otra forma de conocer, un modo de saber  lo que creíamos epistemológicamente ganado; este despliegue creativo  se llama saber pedagógico (Zuluaga, O. 1999). El otro saber irrumpe al trashumar los bordes.

Entonces, investigar, no es que uno conozca mejor su objeto de estudio, sino que lo piensa de otro modo; no es que clarifique los fundamentos que lo acompañan sino que socava esos fundamentos que ya tenía. No es reforzar las teorías sino romperlas como obstáculos. Por esta razón la investigación entra en crisis; es sísmica, desestabiliza lo que nos era cercano y familiar, porque nos hacemos preguntas frente aquello que, hasta ahora,  era natural  obvio y  necesario para nosotros. En Colombia el trabajo investigativo del Movimiento Pedagógico ha sido precisamente un ejercicio telúrico de socavar en doble vía la forma como se ha construido la pedagogía y el oficio del maestro: .una pesquisa histórica, epistemológica de la construcción de la pedagogía como discurso y como disciplina; y un trabajo político de insurrección de la pedagogía como saber sometido frente a los llamados “intelectuales” de la educación.

Por ejemplo, como ya estamos informados de cómo “debe ser” la escuela, no tenemos una forma de acercarnos  a su cotidianidad; como ya tenemos la secuencia metodológica para transmitir se nos escurre por entre los dedos el saber sobre la enseñanza; como ya identificamos el perfil del profesor para los retos actuales, perdemos al maestro; como ya hemos profesionalizado la docencia, menoscabamos el oficio. 

Actividades: 


Seminario Permanente de Fundamentación: se trata sesiones de carácter reflexivo, de debate y producción de escritura a partir de lecturas de autores que aborden temas en torno a la historia de la práctica pedagógica,el horizonte conceptual de la Pedagogía, usos de Foucault en educación, genealogía y arqueología en educación. Para cada semestre se propondrá un autor como referencia para el trabajo del seminario. Las reuniones se harán cada 15 días con una duración de 2 horas.

Grupo de estudio se distribuirá en zonas de trabajo

Zona propedéutica:

Tecnologías del yo, microfísica, cuerpo, escritura, subjetividad, la relación saber/poder en la producción de la subjetividad. El pensamiento como crítica.

Los movimientos pedagógicos en Colombia, la reforma educativa y la contrarreforma política de la educación


Zona de utensilios:

Identificación de conceptos de “emergencia”, “procedencia”, “umbral” “origen”; la nociones metodológicas de gubernamentalizad y biopolítica.

La educación en contextos de flexibilidad. La escuela la sociedad pedagogizada. Pedagogía, cosmopolitismo, globalización.

Zona de ensamblajes:
Crítica del gobierno de sí – gobierno de los otros la noción de “práctica”, régimen de verdad, dispositivo. Hermenéutica y arqueología en el análisis en la producción de la subjetividad, verdad en la escuela y en la educación.